Las familias de barrio Malabrigo, que viven en los terrenos ubicados en la calle 128, cortaron esta mañana la ruta 9 para visibilizar el reclamo por energía eléctrica y agua potable para sus viviendas. Estuvieron acompañadas por militantes sociales que acompañan a las familias en el barrio. Brandan insiste que no autorizará las obras mientras se trate de terrenos usurpados.
Mónica -Vecina
Un nuevo capítulo de la lucha que llevan adelante familias que viven en los terrenos de la calle 128, en cercanías a Malabrigo. Este lunes cortaron la ruta 9 para visibilizar el pedido de inicio de obras para dotar las viviendas de energía eléctrica y agua potable.
Piden que el municipio avale la obra, ya presupuestada y autorizada por la Cooperativa de Servicios Públicos, pero Brandan no da el brazo a torcer ya que alega que no puede firmar una obra en terrenos usurpados.
Monica, vecina del barrio, manifestó a La Ronda que el tema urgente es poder dar los servicios básicos para mejorar la calidad de vida de mujeres embarazadas, niños, niñas y personas con discapacidad que viven en esos terrenos.
Con respecto al agua, el municipio manda un tanque de agua para el aprovisionamiento de los vecinos y vecinas. No obstante, no alcanza para cubrir las necesidades, asegura Mónica.
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